Feliz Navidad

Deseo que así como Jesús vino a nacer a un pesebre, también ustedes le permitan nacer en su corazón, el cual muchas veces es tan pobre como un pesebre, debido a las muchas penas, dolores, problemas; aún así, Dios quiere estar con nosotros (Emmanuel) y habitar allí.

El año en que nació Jesús (7 – 3 a.C.), unos magos entendieron, al mirar el cielo, que alguien muy importante nacería, por esta razón viajaron hasta su encuentro y le regalaron oro (debido a que Jesús es rey), incienso (debido a que Jesús es Dios) y mirra (debido a que Jesús sufriría). Por esta razón, deseo que reciban hermosos regalos. A veces, estos regalos provienen de personas que uno no lo espera. Los regalos de Jesús provinieron de magos de Oriente, es decir, paganos, en vez de provenir de la élite israelita. Por esa razón, deben estar atentos.

Hay personas que creen que los regalos no corresponden a la navidad, pero eso no es tan exacto. Debemos recordar que el Espíritu Santo también nos hace regalos: los dones. El punto es que no nos debemos dejar llevar por la ambición, sino alegrarnos con cosas sencillas, puesto que Jesús nació en una familia sencilla, aunque también bendecida (había unión, paz, amor).

Iglesia del Viento en esta fecha, les desea una Feliz Navidad.

Todos son importantes

Si hay algo que ocurre en las iglesias tradicionales es que los dones  se suelen desperdiciar por no darles el valor que merecen, por lo tanto, suele pasar que las personas no son tomadas en cuenta y no se les da importancia. Generalmente, el único importante es el jerarca.

Se suele creer que el único capaz de hacer milagros, el único capaz de hablar algo sabio, el único de decir una profecía es el sacerdote o el pastor. Lo peor es que ahora ni siquiera hablan de esto, ya que ha habido una pérdida considerable de fe el último tiempo.

Yo creo que los dones están repartidos, lo cual hace que las personas de cada iglesia sean sumamente valiosas.

La Biblia habla acerca de los siguientes dones. Sepan identificar cuál es su don (o dones) para que trabajen con este (estos):

  • Hablar con sabiduría
  • Conocimiento profundo
  • Tener fe de que Dios realiza cosas imposibles
  • Curación de enfermos
  • Poder para hacer milagros
  • Don de hablar profecía
  • Capacidad de distinguir entre los espíritus falsos y el Espíritu verdadero
  • Hablar en idiomas
  • Interpretación de idiomas

No solo debemos saber conocer los dones, sino también ambicionar los mejores. Don significa regalo. Significa que no por ser mejor a uno se le concede cierto don, sino que es un regalo del Espíritu Santo, aquel que mora en nosotros. De esta modo se forma el cuerpo de Cristo; así logra caminar, ayudar a los más desvalidos, fortalecer a los heridos, dar palabras de aliento: a través de su iglesia que la componemos cada uno de nosotros.

Para leer el pasaje bíblico completo lean 1 Corintios, capítulo 12. 

El cristianismo que Jesús no conoció

¿Han pensado alguna vez en qué pensará Jesús de lo que hemos hecho en estos dos milenios de cristianismo? En este artículo diré algunas cosas que Jesús nunca conoció ni pretendió fundar ni realizar.

Las cruzadas

Las cruzadas son una serie de guerras libradas en el extranjero —no eran guerras para defenderse— que tenían plena bendición del Papa y la Iglesia Católica. Su objetivo era recuperar los lugares santos y Jerusalén. La principal serie de cruzadas fue contra los musulmanes (1095-1291). A los soldados que iban a las cruzadas el Papa les garantizaba la indulgencia plena, es decir, el perdón de los pecados.

A los cristianos de esa época —y a muchos de nuestros contemporáneos— se les olvidó este versículo en Zacarías 4,6:

No depende del ejército, ni de la fuerza, sino de mi Espíritu, dice el Señor todopoderoso.

El celibato sacerdotal

El celibato siempre fue un acto voluntario que generalmente practicaban profetas. Pero nunca existió una orden restrictiva de que el celibato fuera obligatorio en sacerdotes. Esto fue un invento del Catolicismo, tal vez porque asociaron el sexo a pecado, pero la verdad es que Dios nunca vio el sexo como algo pecaminoso.

Al leer la Biblia vemos que esto nunca fue prohibido, por ejemplo, lean Éxodo 28,4:

Así que harán ropas especiales para tu hermano Aarón y para sus hijos, para que oficien como sacerdotes míos.

Los santos

En la Biblia santo es quien cree en Jesús y en quien Jesús mora. El problema es que en la Iglesia Ortodoxa y en la Iglesia Católica algunos son objeto de veneración (culto de los santos), cuando la Biblia es clara que al único que le debe rendir culto es a Dios. Se dice que en la Iglesia Católica hay más de 10000 santos. Una de las cosas que me llama la atención es que, actualmente, para que alguien sea llamado santo debe hacer dos milagros estando muerto. ¿No les parece extraño? Sin embargo, la Biblia enfatiza en que los milagros los hacemos los cristianos (en vida), la Biblia enseña que este es un don del Espíritu Santo.

Lean este pasaje de 1 Corintios 12,8-11:

A uno es dada por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de conocimiento según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el mismo Espíritu. A otro, el hacer milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, diversos géneros de lenguas, y a otro, interpretación de lenguas. Pero todas estas cosas las hace uno y el mismo Espíritu, repartiendo a cada uno en particular como él quiere.

Fabricación de imágenes

Si entramos a algunos templos hoy en día vemos figuras de santos y figuras de Jesús, María, José, los apóstoles, etc. Es sumamente curioso que se realice esto, ya que Jesús era judío (algo que casi todos los cristianos olvidan) y su religión le enseñaba lo siguiente:

Deuteronomio 4,15-19

Por lo tanto, tengan mucho cuidado de no corromperse haciendo ídolos o figuras que tengan alguna forma o imagen de hombre o de mujer, o imágenes de animales terrestres o de aves que vuelan por el aire, o imágenes de animales que se arrastran por la tierra, o peces que viven en las aguas debajo de la tierra. De lo contrario, cuando levanten los ojos y vean todo el ejército del cielo —es decir, el sol, la luna y las estrellas—, pueden sentirse tentados a postrarse ante ellos y adorarlos.


Podría continuar con el calendario solar (Jesús usaba el calendario lunar), el latín como idioma oficial del Vaticano —el idioma que habló Jesús era el arameo, el idioma de los que lo crucificaron era el latín—, pero he plasmado lo que creo que es más importante de corregir.

Ahora ustedes conocen, no se equivoquen.

Referencias:

“Inri”, Isaac Bigio. Diario Correo Perú. Disponible en http://diariocorreo.pe/columna/79098/inri/